Hecho a su medida.
Trabajamos estrechamente con nuestros clientes para comprender sus requisitos específicos y proporcionar el producto personalizado que mejor se adapta a sus necesidades.
¿En qué consiste la prueba?

1. Preparación
Se requiere cierta preparación antes de la prueba. Esta preparación incluye suspender ciertos medicamentos y ayunar. Antes de tomar la muestra, el paciente debe beber una solución con alta concentración de azúcar.
2. Digestión
Si una persona tiene intolerancia a un azúcar, este no se absorbe completamente en el intestino delgado y pasa al intestino grueso. Allí, las bacterias intestinales lo fermentan, lo que produce un aumento en la generación de gases como hidrógeno, metano y, a veces, sulfuro de hidrógeno.

3. Muestreo
Después de beber la solución, el paciente exhala en un tubo usando una pajilla para medir los niveles de gases. Este proceso debe repetirse a intervalos regulares durante las siguientes tres horas para monitorizar los cambios en la producción de gases.

4. Análisis
El técnico de laboratorio simplemente lee los códigos de barras 1D/2D, carga los tubos etiquetados en el carrusel y comienza la secuencia. El robot inyecta la muestra en el MicroGC, que informa los niveles de hidrógeno, metano y dióxido de carbono en menos de 2 minutos.

¿Por qué un paciente necesita una prueba de aliento?
Esta prueba se realiza para verificar si el paciente puede absorber correctamente un azúcar específico; en algunos casos, el cuerpo no puede digerir azúcares como la lactosa o la fructosa. La prueba mide un subproducto de la descomposición del azúcar (hidrógeno y metano en fase gaseosa) en el aliento. Si el azúcar no se absorbe adecuadamente, las bacterias intestinales lo fermentan, produciendo hidrógeno, metano y, potencialmente, sulfuro de hidrógeno. En condiciones normales, estos gases están ausentes o en niveles muy bajos en el aliento, lo cual no cambia si el azúcar es absorbido correctamente en el intestino.